Spiderman se enfrenta a una Guerra de bandas
Luchas cósmicas, guerras secretas, clones e impostores, seres imposibles, demonios poderosos… Sí, todo eso y más ha estado bien presente en la vida de Spiderman a lo largo de su muy extensa carrera editorial. No en vano todo empezó en los años 60 del pasado siglo y al contrario que otros compañeros de Marvel Comics sus aventuras nunca han dejado de publicarse. Es más, mientras a algunos les cuesta mantener una sola cabecera él no parece tener problemas en llenar varias, eso sin contar en las que hace aparición como invitado o las muchas versiones que se han hecho en otros medios.
Así pues sucede que todo se complica y se vuelve más épico, hay subidas y bajadas, hay guionistas más fantasiosos que otros y hay historias más exageradas que otras. Esto es así. Pero también está la esencia, el origen y el cómo nació todo. Spiderman nació de la mano de Stan Lee y Steve Ditko y aunque los villanos de trajes estrafalarios y poderes asombrosos estaban ahí también lo estaban los delincuentes, los ladrones, los atracadores y los gánsteres. De hecho estaban ahí antes que nadie, desde el auténtico comienzo.
La eterna presencia del crimen
El primer enemigo que el trepamuros debe combatir es el ladrón que terminó con la vida de su tío Ben, y eso marcó para siempre al héroe. No solo por el hecho de descubrir de esa forma que todo poder conlleva una gran responsabilidad, otro tanto también por mezclar de forma indisoluble a este tipo de criminales con su figura de una forma que no sucede con otros compañeros como los Cuatro Fantásticos o los Vengadores.
Así en el haber de Spiderman se pueden contar muchos como el más que conocido Kingpin, La Rosa, Cabeza de Martillo, el Gran Hombre, los Forzadores e incluso el Duende Verde en sus comienzo con sus intenciones de ser uno de los grandes nombres de este submundo. Es algo que siempre ha estado ahí presente, a veces más y a veces menos, pero el crimen organizado nunca se ha alejado mucho de las páginas del arácnido. Y claro, con tantos nombres peligrosos dentro de la misma olla es solo cuestión de tiempo que esta haga explosión.
En Guerra de bandas: Primer golpe los guionistas Zebb Wells y Cody Ziglar junto a los ilustradores Joey Vazquez, Julian Shay y John Romita Jr. da comienzo esta explosión, esta guerra de bandas entre la Rosa, Búho, Cabeza de Martillo, el Señor del crimen y varios más, todo ello mientras Lápida está inconsciente en el hospital y su terreno, en teoría, sin defensa alguna quedando así expuesto para que cualquiera pueda quedárselo. Este hecho será usado con mucha habilidad para hacer crecer al personaje, y no solo a él, de una manera que por respeto al lector no se narrará dado que es él quien debe llegar hasta ello.
El fantástico arte de John Romita Jr.
Lo que sí puede decirse es que las páginas ilustradas por John Romita Jr., con tinta de Scott Hanna y color de Marcio Menyz, son gloria pura. Este dibujante solo parece mejorar con el paso de los años y cumple a la perfección con ese viejo dicho de “De casta le viene al galgo”. Si su padre fue una leyenda él no se queda atrás, por derecho propio es uno de los autores más representativos de Marvel y cuando se retire será igual de honrado que su predecesor.
Su habilidad se une a un muy buen conocimiento del universo Marvel y todos sus pobladores, algo a lo que la trama sabe sacar buen partido al hacer que además de al superhéroe protagonista y los villanos del momento deba plasmar a otros justicieros. En sus manos Hulka, Spiderwoman, Daredevil (Elektra) y Spiderman (Miles Morales) lucen heroicos, estupendos y totalmente icónicos. Así son, así deberían ser y así serán. Son ellos en cada trazo, giro y sombreado.
El asombro Spiderman (25): Guerra de bandas, primer golpe es el primer capítulo del nuevo evento del arácnido y sí, como cualquier lector sabe, al final todo saldrá bien y volverá a la normalidad. Siempre es así excepto que no lo es. Nunca se salda todo con buen resultado y nunca se vuelve del todo a la normalidad previa. Claro que los héroes volvieron de las Secret Wars pero Hulka se unió a los Cuatro Fantásticos y Spiderman regresó con un misterioso traje negro, claro que la guerra civil entre superhéroes terminó pero el Capitán América murió y Bucky cogió la bandera y el escudo… ¿Cómo de bien y cómo de normal volverá a ser todo cuando esta lucha por el poder del mundo del crimen termine? ¿Qué cambios habrá? ¿Qué personajes serán distintos? Esa es la pregunta y por eso, por responder a esa pregunta, seguimos leyendo.
Únete a nuestro canal de WhatsApp (totalmente anónimo, nadie verá tu nombre o tu número) y no te pierdas ningún contenido. ¡Súmate pinchando aquí!
Escritor y periodista de amplia trayectoria (AQUÍ, Cinemascomics, Infonegocios…), especializado en Cultura Pop aunque también ha escrito de temáticas muy distintas como política y el mundo de los negocios. Creador del personaje infantil Frost, perrito de aventuras descrito por RTVE como «Un nuevo héroe para los niños». ISNI 0000 0004 4335 5012
Lo único que no me gusta es que no paren de separar a Peter Parker y a Mary Jane Watson, con lo bien que estaban juntos. He leído poco de esta etapa, pero al menos me ha gustado ver a Norman Osborn curado y como aliado de Parker, aunque sea temporalmente, dado que se va a convertir en el Duende Verde otra vez (ya sabíamos que eso no iba a ser definitivo, las cosas como son), quién iba a decir que Spider-Man/Peter Parker podría llegar a volverse loco como Norman atacando a M.J. por abandonarle?
Lo bueno y lo malo de estas historias es que nunca terminan y claro, eso conlleva que muchas cosas que nos parecen imposibles terminen pasando. Algunas mejores, otras peores, algunas magníficas y otras más olvidables.
Olvidables como «Pecados del pasado» o «Un día más» y su famoso «Mefistazo», tengo entendido que no gustó a nadie, a mí me hizo llorar.
No, mucho no gustó por el cómo se hizo. Que eso no quiere decir que a ti no te pueda gustar, los gustos de cada uno son de cada uno y todos tenemos derecho a disfrutar (y es lo mejor, si a todos nos gustara lo mismo qué aburrido sería todo).