Segunda parte del artículo en el que seguimos hablando del término “Kidult”, o “Niñombre” según la reciente polémica de la que se ha hablado ya, y más en concreto de algunos productos destinados a este. Aunque atento a un matiz muy, pero muy importante: puedes ser un adulto que coleccione juguetes y que una gran mayoría del género que se vende bajo esa etiqueta no sea de tu agrado, y es que muchos de ellos son juguetes ideados bajo patrones de lo que a un adulto le gusta, o debería según ciertos cánones e ideas (que empiezan a estar anticuadas y caducas).
Nos gustan los juguetes
En docpastor.com – Amamos la Cultura Pop se habla de juguetes de forma habitual. No entendidos estos como productos “Kidults” o materiales de colección, o inversiones, nada de eso. Se tratan como lo que son: juguetes. Y no pasa nada, un juguete es un juguete. De hecho, varios de los miembros de este equipo somos coleccionistas de los mismos: Jordi Olivera es amante declarado de LEGO y Marta Beren colecciona figuras de PVC de Disney y Pixar. Nos gustan los juguetes y no buscamos eufemismos para ello.
En lo que se refiere a un servidor es bien sabido que soy amante de la Cultura Pop en muchas formas y en mi colección hay desde un guion original de Batman (usado en la serie de los 60) a arte original de varios autores pasando por, por supuesto, juguetes, en su mayoría figuras de acción. De hecho en mi etapa de escritor libros de ensayo, actualmente cerrada en favor de la narrativa, publiqué un libro sobre el tema titulado De Spider-Man a G.I. Joe: la acción hecha figura con diferentes colecciones, algunas añejas y otras en tienda en el momento del lanzamiento.
El producto “Kidult”
De hecho en parte gracias a este libro pude ver el enfoque que muchos consumidores del target “Kidult” parece tener: una nostalgia muy evidente, un coleccionismo que parece sustentarse en el ansia de lo que va a comprarse y no en disfrutar de lo comprado y una clara preferencia a ir a una tienda especializada que a una juguetería, por lo comentado por algunos por su propia vergüenza al hacerlo. Matizo el “Muchos” y no digo “Todos”, cada caso es único y distinto. El mío no entraría en esa categoría, no siento especial interés por los productos de nostalgia por nostalgia, intento disfrutar de mi colección sin pensar en qué llegará más adelante y jamás he sentido problema en ir a jugueterías, de hecho varios de mis vídeos de Tik Tok son paseando por alguna.
Dos claros ejemplos de qué puede considerarse un producto “Kidult” vendrían de la mano de Fisher-Price, conocida por sus juguetes para pequeños. Para los más pequeños, para ser exactos. Y en un afán de captar a través de sus propuestas a ese público han comercializado a través de Littlepeople Collector un set basado en Friends con el equipo protagonista cada uno reconocible por algún elemento característico. Así en el caso de Joey es inevitable que no salte por esa mítica escena en que va con varias capas de ropa o Mónica con su traje de chef, además del fondo que es el inolvidable piso que esta comparte con su amiga Rachel, quien lleva el delantal del Central Perk.
En estas misma línea, y misma colección, está el pack de Harry Potter. No hace falta hacer presentación alguna de esta saga, de los libros o de las películas que tanto éxito han tenido. Y este caso el lote está compuesto por el propio Harry, Hermione, Dumbledore y un bastante atemorizado Ron. Igual que el anterior una caja pensada para ese teórico coleccionista “Kidult” y, por otro lado, una buena forma de unir a niños y progenitores para que jueguen de forma conjunta al crear un producto que ambos pueden disfrutar.
Construcciones para adultos
Por otro lado LEGO es bastante prolífica en sus sets para adultos, esas flores y cuadros de todo tipo, que aunque por las cifras dadas por la empresa parecen funcionar bien no terminan de ser del agrado del coleccionista de la casa. El coleccionista de LEGO, al menos por lo que he podido comprobar, lo es del formato tradicional, de las minifiguras, las ciudades y dicho de forma clara de todo en lo que uno piensa cuando le hablan de los ladrillos de LEGO.
Pero esa idea no solo es de la empresa danesa, por ejemplo Mega Bloks, o sencillamente Mega, también se ha lanzado a ello con sus propias propuestas. Una de las más llamativas es su Xbox 360 que incluso trae un mando, un pincho USB y el juego Halo 3, o al menos sus versiones para montar en pequeñas piezas a escala. No solo la carcasa, también el interior que tiene además luz en distintos sitios. Y hay que decir que es la mentada consola sin lugar a dudas, esa que se lanzó hace dos décadas y que sirve para demostrar, otra vez, que lo que mueve mucho del mercado “Kidult” es la nostalgia.
He de confesar que considero más divertido otros sets, como el fantástico Barco tiburón de las pesadillas de LEGO, que lo que no deja de ser un ladrillo gris hecho de otros ladrillos grises. También que al ser daltónico sin interés en los videojuegos la idea de enfrentarme a una construcción monocolor de una consola se me antoja harto tedioso y aburrido. Pero es entendible que exista un público para este y otros productos similares, que solo quieran recuperar sus recuerdos de una época pasada y tener en su estantería una Xbox, sea esta la que tuvieron de verdad, la que nunca pudieron tener o una réplica de la misma.
Disfruta de tus juguetes
Al final esto es una cuestión personal. No es distinto coleccionar sellos de coleccionar Pitufos, tampoco hacerlo con cuadros de Picasso que con versiones del Quijote, o tener Pops de Funko o cajas de cerillas. El ser humano es coleccionista por naturaleza, es un instinto atávico, y puestos a hacerlo mejor que sea algo que nos gusta. En mi caso juguetes, sin ambages y sin excusas (nunca me oiréis decir “no son juguetes, son objetos de colección”), otros prefieren las líneas ideadas bajo las pautas de “Kidult” (tampoco nada nuevo, ¿recuerdas los Monclis?), desde siempre han estado ahí los que coleccionan monedas que jamás se gastarán y en fin, una larga y enorme lista que se resume en algo comentado y dicho en otros artículos, entrevistas y vídeos: Nunca se es demasiado mayor para hacer lo que nos gusta.
Escritor y periodista de amplia trayectoria (AQUÍ, Cinemascomics, Infonegocios…), especializado en Cultura Pop aunque también ha escrito de temáticas muy distintas como política y el mundo de los negocios. Creador del personaje infantil Frost, perrito de aventuras descrito por RTVE como «Un nuevo héroe para los niños». ISNI 0000 0004 4335 5012