Los tres protagonistas de Colin de cuentas
Una de los mejores puntos a su favor que tienen las sitcoms es que la partida puede hacerse desde cualquier sitio, y ejemplos hay un buen montón de ellos. En Cheers la excusa es que todos son los parroquianos de un bar, en Cómo conocí a vuestra madre es un padre que cuenta a sus hijos la historia de cómo llegó a conocer y a enamorarse de su madre, en Los Simpson es el día a día de una típica familia de clase media estadounidense… No hay un límite, todo motivo es bueno para que la comedia se abra paso, incluso el atropello de pobre perrito.
Que nadie se asuste, el peludo en cuestión sobrevive y gracias a ello encuentra una familia o al menos dos personas que se preocupan por él, que serán precisamente los protagonistas del show. Por un lado está Ashley, una estudiante de medicina algo excéntrica a la que da vida Harriet Dyer y por el otro Gordon (al que le gusta que llamen Flash), un barista con su propia microcervecera y una clara carencia afectiva que viene de largo tiempo atrás al que interpreta Patrick Brammall. Y Colin, claro, el adorable pequeño (Zak en la vida real) que aunque da nombre a la producción es, y hay que decirlo, el que menos relevancia tiene de los tres pero el que se roba la serie cada vez que aparece en pantalla.
Una divertida comedia que solo quiere entretener
La producción está firmada por los mismos profesionales que dan vida a los protagonistas, ambos con experiencia previa en tareas creativas conjuntas (además de ser matrimonio) en las series No Activity y Summer Love. Esta experiencia previa trabajando mano a mano es patente en esta producción donde los personajes están bien estudiados, el ritmo es más que correcto y las situaciones suceden de forma orgánica, a pesar de que estas puedan llegar a ser más o menos absurdas. El total es coherente en sí mismo y eso es lo que importa.
Colin de cuentas es una divertida serie australiana que va de menos a más, el primer episodio ejerce como total presentación de los implicados, sus vidas y sus circunstancias, algo necesario para que la trama pueda arrancar, para después ir creciendo poco a poco y mejorando a cada capítulo. Que nadie se agobie si se queda con ganas de más, la segunda temporada está a punto de llegar.
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