El actor Matthew Perry
El último fin de semana de octubre de este 2023 se tiñó de tristeza cuando todos nos enteramos del fallecimiento de Matthew Perry, una semana que también nos había arrebatado a Richard Roundtree y a Richard Moll. Malos días para los amantes del cine y la series, nos despedimos de Chandler, de Shaft y de Dos Caras, no solo de ellos, los tres tenían un historial mucho mayor de lo que, en general, se suele suponer.
Pero vamos a Matthew Perry, es en el que quiero centrarme. En 1994 empezó a trabajar en Friends en un papel que era perfecto para él, aunque casi se queda fuera del proyecto por un compromiso profesional previo, y gracias a esta serie alcanzó la fama y el éxito al igual que todos sus compañeros. Algo que tuvo sus luces y sus muchas sombras, como él mismo narra en su autobiografía Amigos, amantes y aquello tan terrible, debido a sus problemas con el alcohol y las drogas que se acuciaron más que nunca.
Hay vida más allá de Chandler
Estas breves letras no van sobre eso, no voy a ahondar en sus problemáticas (el que quiera saber más que acuda a su libro, así podrá conocerlo de su propia mano y voz) lo que quiero es rendir homenaje a un buen actor que era más que un solo personaje. Su vis cómica y su timing eran fantásticos, lograba conquistar a la sala y hacer reír con un solo gesto, con una sencilla mirada y por supuesto pudo hacerlo mucho más allá de Friends.
Matthew Perry también brilló en el cine gracias a películas como Falsas apariencias en la que comparte cartel con Bruce Willis o Colgado de Sara con la británica Elizabeth Hurley, si bien no diré que este es un filme fantástico sí logra su objetivo de hacerte reír y pasarlo bien (y eso es lo que importa). Y por supuesto en otras tantas series, ya fuera en Ally McBeal o en Scrubs, pero donde más brilló en opinión del que esto escribe fue en la por desgracia poco conocida Studio 60.
Su mejor actuación
En esta producción de Aaron Sorkin unía fuerzas con Amanda Peet, quien también aparecía en la ya mentada Falsas apariencias, Sarah Paulson y el siempre magnífico Bradley Whitford, entre otros que completaban un elenco de ensueño. Sin duda esta es su mejor interpretación teniendo todos ellos momentos para lucirse y dejar claro de qué eran (y son) capaces en una cabecera que trata sobre el mundo de la televisión visto desde dentro (la simple firma de Aaron Sorkin debería bastar para que cualquiera quiera verla).
Matthew Perry fue un actor cómico con una vida trágica, una persona que intentó hacer reír a los demás mientras él sufría por dentro, algo que tiene un gran valor sencillamente incontable. Así las redes se llenaron de muestras de amor y respeto hacia un hombre que pasó por la vida de millones, y sin duda hizo que todos nos riéramos.
