Portada de Lejos, obra de Alicia Jaraba. Créditos: Editorial Nuevo Nueve

Portada de Lejos, obra de Alicia Jaraba. Créditos: Editorial Nuevo Nueve

Nuestro comentario sobre Lejos, la nueva obra de Alicia Jaraba.

La palabra «lejos» tiene un significado muy concreto: a gran distancia. Pero la particularidad de esta es que esa distancia es muy difícil de cuantificar en muchos momentos. «Lejos» puede medir todo un universo, pero en la realidad es estar a milímetros de una persona. Esto es de lo que nos habla Alicia Jaraba en su nueva obra para la editorial Nueve Nueve.

Leí la historia del tirón (totalmente enganchado) un lunes a las 7:30 de camino al trabajo. Fue entonces cuando supe que elegí una historia especial. Cuando una historia es capaz de vencer a las tropas de Morfeo es por alguna razón. Podría haber seleccionado otra novela gráfica o releer alguna de las muchas que se tienen de cabecera, pero lo que más me atrajo de esta fue lo interesante de su temática: el ser humano y su relación con lo que le rodea, en especial consigo mismo.

Imagen de Lejos, obra de Alicia Jaraba. Créditos: Editorial Nueve Norte
Imagen de Lejos, obra de Alicia Jaraba. Créditos: Editorial Nuevo Nueve

Lejos: Historia conocida, pero no trillada

Encontramos una historia sencilla, pero que nace de lo más profundo de la humanidad. Es normal tener la sensación de que hemos visto esta historia miles de veces, pero no por eso esta se hace pesada o aburrida. Son tantos los matices que pueden variar en ella, que la convierten en una historia universal.

No tardamos muchas páginas en descubrir de que va la historia: dos personas que se quieren. Una pareja que, a pesar de todo el tiempo que llevan juntos, desconfían y saben que están heridas en su interior. Ella, a punto de emprender un trabajo de ensueño tras meses dedicados por enteros a lograr ese sueño. Él, perdido en sus necesidades, sin tener claro su destino y distanciado de ella durante meses.

Dos personas absolutamente tridimensionales. Una pareja con dudas. Son arquetipos que conocemos y vemos a lo largo de nuestra vida una y otra vez. Para que negarlo, hemos sido nosotros más de una vez…

Lo que hace especial a la obra es su naturalidad y el cuidado por los detalles. Esta historia ha pasado, pasa y pasará una y otra vez. La dificultad de mantener una relación (del tipo que sea) sin tener en cuenta tu pensamiento y tus necesidades está siempre presente. Difícilmente habrá confianza si nadas en un pozo de inseguridad.

Imagen de Lejos, obra de Alicia Jaraba. Créditos: Editorial Nueve Norte
Imagen de Lejos, obra de Alicia Jaraba. Créditos: Editorial Nuevo Nueve

Esos detalles también se encuentran en la forma de narrar la historia. Esta se enmarca en un verano, donde son muchos los planes que se hacen y, también, son muchos los problemas que encontramos. Problemas que nos traen anécdotas y “aventuras” que nos sirven para recordarlos con añoranza.

El mar es una metáfora antiquísima, pero aquí cobra una relevancia crítica al reflejar ese mundo desconocido de nuestro interior. Mundo que una vez empiezas a conocer es absolutamente maravilloso (y fascinante si recordamos sagas como Del Revés)

Cada anécdota o personaje añade una capa extra de interés y comprensión para ir de la mano de ambos personajes. Ambos son entendibles y esta no es una historia donde elijas a uno por encima del otro. Los argumentos de ambos son muy válidos y seguro que, leyendo esta obra en momentos diferentes, comprenderás cosas que antes pasaban desapercibidas.

Igualmente, cada persona que los protagonistas encuentran en su ruta ayudará a poner el pensamiento de ambos en su lugar, permitiéndoles ver cosas en las que no repararían de hacerlo por si mismos. Vemos la paja en el ojo ajeno, pero no la viga en el nuestro…

Imagen de Lejos, obra de Alicia Jaraba. Créditos: Editorial Nueve Norte
Imagen de Lejos, obra de Alicia Jaraba. Créditos: Editorial Nuevo Nueve

Antes de terminar, hay que señalar un “pero” garrafal: me ha fastidiado tremendamente el poco cuidado que parece haberse prestado a los errores ortográficos y tipográficos a la hora de editar la obra. Según pasas las hojas y entras en la historia, una errata de este tipo puede sacarte por completo de la lectura. Pediría un poco más de cuidado en la editorial ante estas cosas porque hace desmerecer el trabajo de los creadores/as.

Lejos es una obra que puedo recomendar fácilmente ya que, sin importar las veces que vaya a leerla, siempre encontraré un detalle nuevo del que no me fijé antes. Y esas son las historias que uno disfruta sin medida.

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