
El icónico John Steed de Los Vengadores. Créditos: ITV
¿Era John Steed, de Los Vengadores, un dandy? Esta palabra significa según la Real Academia de la Lengua Española:
- Hombre que se distingue por su extremada elegancia y buen tono.
Si nos basamos en esta sencilla definición entonces John Steed lo es y de forma exacta. Nadie pone en duda su extrema elegancia y que tiene un buen tono físico, ya que le vemos practicar deporte además de ser un diestro espadachín. Pero si vamos algo más allá y se toman en cuenta las características que definen a este prototipo de hombre, que según algunos nunca llegó a existir del todo en la realidad, siendo un producto más ficticio que otra cosa.
Además del buen vestir, está el hecho de ser aristocrático en sus formas y maneras pero en el sentido negativo del término, amén de que le gusta la vida disipada y llena de divertimentos para llenar el tiempo vacío que tiene ya que nunca hace nada útil. Con todo esto por delante queda en evidencia que aunque en algunos artículos se le tacha de dandy solo lo es por coincidencia del aspecto visual, pero nada más. Es un hombre entregado a sus amigos y su trabajo, que no rechaza la diversión pero que jamás deja de lado su deber.
El estilo de llevar un coche en Los Vengadores
Lo que más pega para John Steed es verle sobre un caballo luciendo una chaqueta de montar, un chaleco estampado de W. & H. Gidden y un precioso pantalón de equitación de Bernard Weatherill, algo que más o menos es lo que en “Silen Dust” vemos cuando rescata a Emma Peel con la ayuda del mismo corcel que dos décadas antes montó Laurence Olivier en la película Enrique V. Pero aunque en nuestra mente debería trasladarse siempre así, o en una calesa, eso no era muy práctico y ciertamente sí anacrónico, con lo que a lo largo de la serie le vimos al volante de distintos coches.
Durante los primeros tiempos los automóviles que condujo en Los Vengadores fueron un AC Greyhound, un Triumph Herald, un Lagonda, vehículo que repetirá en la tercera temporada pero cambiándolo por un modelo retro que era más adecuado a la cada vez más clásica figura que el personaje iba teniendo.

Y entonces llegó el Bentley
Este será el coche que definirá completamente al personaje. Al igual que él parece sacado fuera de su época, pero logrando estar totalmente integrado con ese mágico universo de Los vengadores en el que en ocasiones el tiempo parece detenido y otras tantas va a doble velocidad respecto del real. Por supuesto no podía ser un último modelo y se eligió uno de antes de la guerra, de color verde y cuero negro para el interior (la elegancia y el estilo por encima de todo) aunque esto no se supo hasta la quinta temporada, que fue la primera en color.
Hasta ese momento todo eran suposiciones, o no tanto ya que el modelo era un Green Label (que databa de 1928). Claro que no siempre fue el mismo, durante los rodajes se cambiaron pero a ojos de nosotros, el público, es algo realmente imperceptible y que únicamente tiene importancia desde el punto de vista interno de la producción.
Por supuesto si su bombín era un arma y el paraguas estaba lleno de artilugios no podía ser de otra forma para su coche. También lucía diferentes gadgets, por ejemplo un televisor que hizo precisamente aparición en “Un toque de azufre” el mismo episodio en el que el Hellfire Club tuvo su legendario momento de gloria.
Otro de los vehículos característicos de John Steed llegará con la época de Tara King, algo así como «compañera nueva, coche nuevo» en el que además del característico Bentley le veremos tener un cierto gusto por la codiciada marca Rolls-Royce en dos modelos: un Silver Ghost de color amarillo y un Phantom Tourer MK1.
En Los nuevos vengadores el color verde seguirá siendo del agrado de John Steed pero en este caso en un Jaguar XJ12, un Rover modelo WOC 229P y otro de la misma marca de tono más oscuro.
La comparativa con James Bond
Es inevitable que cuando pensemos en agentes secretos nos venga a la cabeza James Bond, en concreto su versión cinematográfica más que sus originales aventuras en el ámbito literario. Este conocido personaje realmente dista mucho de ser todo un caballero y no hay más que verse cualquiera de sus películas para que esto nos quede claro. Bebe, y bastante, no duda en usar la violencia si con ello logra sus fines y cumplir su misión, y no digamos ya la machista actuación con las mujeres que van pasando por su cama (o por el sitio que sea) que nunca logran ser para él más que objetos de quita y pon.
Pero más allá de esta típica virilidad y un toque masculino totalmente tópico (y ciertamente anticuado hoy en día) late un corazón entregado a la justicia y a la corona británica, esto es algo que comparte con John Steed y es que ambos jamás dudarán en sus misiones para combatir al villano de turno y salvar al reino de Inglaterra, o al mundo si llega el caso.
Quitando esto y que ambos vayan implacablemente vestidos, aunque con diferencias notables en el tipo de indumentaria que llevan, y otro tanto el cómo lo llevan, ya que en el caso de James Bond, aunque luce, le falta ese punto de humildad y elegancia natural que a John Steed le sobraba debido al estilo que destilaba Patrick Macnee a cada momento.
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Escritor y periodista de amplia trayectoria (AQUÍ, Cinemascomics, Infonegocios…), especializado en Cultura Pop aunque también ha escrito de temáticas muy distintas como política y el mundo de los negocios. Creador del personaje infantil Frost, perrito de aventuras descrito por RTVE como «Un nuevo héroe para los niños». ISNI 0000 0004 4335 5012