La Cosa: La hora de las tortas (¡Diversión a raudales! ¡Y viajes en el tiempo!)

En el cruce de JLA/Vengadores de Kurt Busiek y George Pérez el Capitán América dice a Batman que Ben Grimm (la adorable Cosa de ojos azules) es “Uno de los mejores héroes que conozco” y si él lo dice debe ser cierto (ya sabes, el Capitán América no miente). Y sí, claro que es cierto, es una gran verdad. Ben Grimm es uno de esos héroes de Marvel Comics hecho a sí mismo, sus poderes son más una maldición que una bendición y con el paso de los años ha demostrado una y otra vez su heroísmo. Además el transcurrir del tiempo ha conllevado que los diferentes guionistas le hayan hecho evolucionar pasando de ser una criatura amargada a un tipo amable y simpático que disfruta con sus aventuras (como hacía Ojo de halcón hace décadas, cuando sonreía y se lo pasaba bien).

Esto es algo que Steve Skroce tiene más que claro y también que algo que define al personaje es que ha formado grupo con otros tantos, no solo como parte de los Cuatro Fantásticos (miembro titular por excelencia), ha sido parte de otros equipos y ha tenido historias con un auténtico quién es quién de Marvel Comics. Así que el autor no duda a la hora de la Cosa una sus fuerzas a Hulk, con el que ha tenido tantos enfrentamientos como momentos de amistad (uno de los mejores en El inmortal Hulk cuando Joe Fixit lleva los mandos), con el Doctor Extraño haciendo que recordemos el tomo Strange Tales de (una vez más) Kurt Busiek y Ricardo Villagrán (a su vez un homenaje en sí mismo), además de Lobezno y, lo mejor de todo, con el Doctor Muerte.

Viajes en el tiempo, otros planetas, amigos, enemigos…

Los viajes en el tiempo lo lían todo, esto es así, pero también hacen que todo sea más divertido y una trama de periplos cronales bien narrada es una delicia. No tiene que ser compleja, no hace falta que cambie nada o que innove, solo ser entretenida, tener coherencia y respetar sus propias normas, algo que es así en La Cosa: La hora de las tortas en la que no solo hay una divertida, interesante y atractiva historia de viajes en el tiempo, también hay una clara investigación sobre quién es Ben Grimm, su forma de actuar, su heroísmo, cómo es con otros compañeros de profesión, sus admiradores y, por supuesto, sus piques con Johnny Storm. Dicho de otra forma, y muy sencillamente, Steve Skroce sabe bien qué está haciendo.

La Cosa: La hora de las tortas es uno de los cómics de Marvel más entretenido de los últimos tiempos, diversión en estado puro que te hace pasar una página tras otras sin querer parar. Una historia que (en principio) empieza y acaba sin dejar cabos sueltos aunque sí algunos hilos de los que quizá tirar más adelante, con un trazo bien trabajado y algunas escenas de acción que podrían estar en cualquier entrega de Los Mercenarios (equipo en el que, por otro lado, el protagonista de este tomo encajaría a la perfección). Héroes, villanos, viajes en el tiempo, guiños, referencias, humor… ¿qué más se puede pedir?

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