Imagen promocional de Materia oscura de Apple TV +
El gran aliciente de Materia Oscura, o Dark Matter, es ella misma. Es ser la adaptación a serie de la conocida obra literaria que además tiene detrás a Blake Crouch para ello, el escritor de la novela se encarga de llevarla a serie lo que alegrará, y mucho a sus lectores. No es esta la primera vez que lo hace, también fue así en la recomendable y para muchos extraña Wayward Pines, una producción que se quedó en el aire con la promesa de una tercera temporada que nunca llegó a realizarse.
Blake Crouch sabe crear suspense
Este primer episodio de Materia oscura sienta las bases de todo lo que está por venir y lo hace con acierto, con habilidad y con una adicción que empieza a forjarse desde el primer minuto. El suspense y el desconocimiento de qué está pasando lo llena todo y si bien el que debería ser el giro principal no sorprende al espectador sí lo hace para con el personaje principal dejando en el aire la pregunta general de ¿Qué está pasando? seguida de ¿Hacia dónde irá todo?, algo que deberá explicarse con el devenir de los próximos capítulos.
Lo que queda claro es que Blake Crouch sabe crear y mantener el suspense, al igual que logra crear un mundo creíble muy parecido al nuestro pero algo más oscuro, casi como si la esperanza se hubiera perdido por el camino. En cierto sentido hay una cierta deuda con Blade Runner no tanto en lo argumental como en lo ambiental y en lo visual, con un cierto toque noir que ojalá vaya a más y que puede convertirse en la seña de identidad de toda la producción.
Actores reputados
A su favor tiene además el contar con actores reputados como Jennifer Connelly (Una mente maravillosa, Casa de arena y niebla) y Joel Edgerton (El gran Gatsby, Identidad borrada), quizá más afectados de lo que deberían pero defendiendo bien sus papeles. A su lado están Alice Braga (Hypnotic, El escuadrón suicida) con una actuación cuidada y acertada, y Jimmi Simpson (Westworld, Pachinko) que a pesar de lo breve de su aparición se come la pantalla cada segundo que aparece en escena.
El primer capítulo de Materia oscura sabe jugar bien sus cartas sin llegar a mostrarlas del todo, solo unas pinceladas aquí y allá que son suficientes para dejar con ganas de más. Queda por delante toda una temporada que debe demostrar si los hechos están a la altura de las promesas y las intenciones o, si por el contrario, todo se desinfla por el camino.
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