Portada de El Quijote de Will Eisner
Si coges a dos genios y mezclas sus talentos es muy probable que el resultado sea algo estupendo. Así es en El Quijote de Will Eisner, una revisión del clásico de Miguel de Cervantes en la que se nota el amor del dibujante estadounidense por la conocida obra española. Pero no sería cierto decir que pretende ser una adaptación de la misma, más bien es un pequeño homenaje y una posible presentación para aquellos que no la conozcan.
Más en concreto para los lectores de su país que no la conozcan y más específico todavía para los televidentes, dado que todo nació de una idea para un posible programa televisivo que nunca llegó a ver la luz. Pero Eisner siguió adelante y con los originales nunca usados se lanzó y los reconvirtió en este cómic que en su país de origen lleva por título The Last Knight. An introduction to Don Quixote by Miguel de Cervantes, lo que deja bien claras las intenciones que Will Eisner tenía y el motivo de su realización.
Un sentido homenaje
Así a través de unas breves páginas el estadounidense condensa algunos de los momentos más recordados e icónicos de esta novela, recoge a sus personajes y los dota de una nueva vida que es totalmente fiel a la esencia e idea que su creador tuvo de los mismos. Lo hace todo como si de los recuerdos de Sancho Panza se tratara, quien en sus años maduros rememora el tiempo que pasó con el que para él fue un caballero y más tarde una leyenda.
El momento más emotivo de este breve trabajo llega al final del mismo. Sin desvelar nada puede decirse que la realidad y la ficción se dan de la mano para hacer que lo que para muchos era una locura se convierta en un sueño, de la fugaz locura de Alonso Quijano al sueño eterno de Don Quijote de La Mancha.
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