Las nuevas emociones de Del Revés 2

Las nuevas emociones de Del Revés 2

Del revés fue la película que nos presentó las emociones más primarias del ser humano. Del revés 2 nos trae nuevas emociones más complejas.

Del revés (Pete Docter, Ronaldo Del Carmen, 2015) nos enseñó de forma muy entretenida las emociones más primarias del ser humano, y cómo a medida que vamos creciendo estas se van combinando y pasan de crear esferas de recuerdos simples a otros más complejos.

Cuanto más mayores nos hacemos, más importante es poder definir estas emociones que nos producen los acontecimientos diarios que vivimos, y puesto que tanto nuestros conocimientos del mundo como las prioridades cambian a medida que envejecemos, el dar nombre a lo que sentimos se vuelve cada vez más importante.

Hemos hablado en el pasado de nostalgia, de ansiedad y de depresión, conceptos que últimamente vemos en todas partes y que poco a poco se han ido haciendo un hueco en la normalidad, lejos de aquellos tiempos en los que se miraba con desprecio y vergüenza a aquellos que lo sufrían y se les acusaba de ser demasiado perezosos. Es por ello que necesitábamos una segunda parte de la película de Pixar.

Del revés 2 (cuya fecha de estreno oficial es el 19 de junio), presenta junto a su elenco principal de cinco emociones (Alegría, Tristeza, Asco, Miedo e Ira) tres nuevas: Ennui (que se podría traducir por Apatía), Ansiedad, Envidia y Vergüenza. Vosotros lectores seguramente estéis familiarizados con algunas de (o todas) ellas. Y es que son sentimientos que nos acompañan desde que empezamos a ser conscientes de nosotros mismos y de lo que nos rodea, en un momento de nuestras vidas en el que estamos experimentando el cambio de niños a adultos.

A menudo difíciles de diagnosticar y que por desgracia durante muchas décadas se han reducido al mínimo común denominador de “está con el pavo”, son emociones que nos preparan para un mundo lejos de la inocencia y la alegría de la infancia, en la que todo se vuelve un poco más gris si nos dejamos arrastrar en exceso por ellas. Timidez, inseguridad, complejos, mala situación familiar o escolar son los habituales desencadenantes de estas emociones y que, por desgracia, provocan secuelas más allá de la etapa adolescente.

Las “nuevas” emociones

Apatía nos sigue casi durante toda nuestra vida y nos acompaña en aquellos momentos de incertidumbre e inacción, cuando no tenemos energías para hacer nada aunque el cuerpo y/o la mente nos pide movimiento o entretenimiento pero sin ser muy específico y de repente nos damos cuenta de que llevamos varias horas haciendo literalmente nada. O también cuando deseamos hacer algo pero no tenemos los medios o las personas cerca para poder hacerlo.

Ansiedad es el miedo a lo que está por venir, a menudo sin que tengamos una seguridad de que realmente algo va a pasar. Sin embargo, nuestra mente se adelanta a los acontecimientos a modo de protección de una posible situación dolorosa, generalmente asociada a memorias similares del pasado.

Algunas veces nos sentimos tristes no por algo que nos ha pasado, sino por algo bueno que le ha pasado a otra persona, o por algo que tiene que nos gustaría tener. Aquí entra en escena Envidia, la que en los cuentos clásicos es representada como una voz malvada en nuestra cabeza. Y quizás los relatos no iban mal encaminados en representarlos de esta manera.

Cuando de repente nos encontramos en situaciones incómodas ante la mirada de otros, Vergüenza es la responsable de nuestro primer impulso de salir corriendo de la escena. En la parte positiva, es una emoción que nos avisa de que no estamos haciendo algo bien. En la parte negativa, nos puede paralizar en un momento decisivo y podemos perder una oportunidad que puede ser más o menos importante para nosotros, a menudo motivada por su gran aliado Miedo, y con el que a menudo se confunden.

Para todas estas situaciones, profesionales médicos como psicólogos y psiquiatras son los mejor preparados para ayudarnos a afrontar estos momentos, reconocerlos y darnos las herramientas para sobrellevarlo y que no nos afecte demasiado. Y para ello, tal y como reza el título de este artículo, es importante que primero de todo le pongamos nombre a lo que sentimos para poner orden en nuestra cabeza. Y por ello, Del revés 2 es necesaria.

Únete a nuestro canal de WhatsApp (totalmente anónimo, nadie verá tu nombre o tu número) y no te pierdas ningún contenido. ¡Súmate pinchando aquí!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *