Los amores de Anaïs y a A Wong Foo, ¡gracias por todo! Julie Newmar, dos películas muy distintas pero con una misma base: el amor.

La noche del sábado le propuse a mi pareja sumergirnos en dos películas muy diferentes, por un lado la francesa Los amores de Anaïs y por el otro la americana A Wong Foo, ¡gracias por todo! Julie Newmar. Dos productos muy diferentes tanto en país, como en estilo y trama, pero que tienen algo en común, hablan de amor.

Sí, en cada caso el amor del que se habla es ciertamente diferente, pero no por ello deja de ser amor. Ya lo decían en Love Actually (película que veo todas las navidades): El amor, en realidad, está en todas partes.

En el caso de Anaïs (Anaïs Demoustier) es un amor romántico, un amor joven e idealizado, el que la protagonista siente por Amelie Ducret, una escritora a la que ha descubierto y con la que comparte, parece, gran parte de su visión de la vida. Y si bien la presentación de personajes es más que correcta, el filme peca de ser irregular en todo su metraje, dando la sensación de no tener del todo claro a qué puerto se dirige y qué público estará en la sala.

Debido a este motivo la propuesta de la directora y guionista Charline Bourgeois-Tacquet (también tras En un muelle de Normandía) deja un sabor agridulce, ya que si bien sigue siendo una película recomendable al término de la misma queda la sensación de que podría haber sido mejor, y tan solo con tres o cuatro cambios en su montaje. Lo que sí es cierto, y hay que decirlo, es que las actuaciones son estupendas, destaca por encima de todas la de Emilie interpretada por Valeria Bruni Tedeschi, actriz que se come la película desde el primer momento que aparece en pantalla.

Quizá hasta podría competir con Patrick Swayze con su Vida Boheme de A Wong Foo, ¡gracias por todo! Julie Newmar, y es que aunque el actor siempre será recordado por su papel de Johnny Castle en Dirty Dancing para mí siempre estará en segundo lugar ante la gran Vida. El mundo sería un lugar mejor si todos nos pareciéramos un poco a Vida.

Y es que este título que firman Beeban Kidron, director, y Douglas Carter Beane, guionista, es una película llena de amor por los demás, por la vida y por ser nosotros mismos. Es un precioso cuento con final feliz que deja una gran sonrisa en la boca, da igual si es la primera vez que la ves o la cuarta, eso no cambia. El que de forma reciente haya salido, por fin, a la venta en Blu-ray, es motivo de alegría para todos los que somos fans de este filme, y debería serlo para todo amante del cine en general.

Lo único que se extraña es algún tipo de contenido extra ya que el disco no trae nada más que la película, por suerte Vida (Patrick Swayze), Noxeema (Wesley Snipes) y Chi-Chi (John Leguizamo) son más que suficientes para que merezca la pena comprar este título para nuestra vídeoteca.

Los amores de Anaïs y a A Wong Foo, ¡gracias por todo! Julie Newmar, dos películas muy distintas pero con una misma base: el amor. ¿Y hay algo mejor que disfrutar del amor el cine un sábado por la noche con nuestro proyector calentitos en casa?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *