Portada de una revolución llamada Rasputín. Créditos: Norma Editorial

Portada de una revolución llamada Rasputín. Créditos: Norma Editorial

Rasputín es uno de los grandes personajes históricos, uno al que Hernán Migoya y Manolo Carot retratan en Una revolución llamada Rasputín.

Rasputín es uno de los grandes personajes históricos de los siglos XIX y XX, uno al que Hernán Migoya y Manolo Carot retratan en Una revolución llamada Rasputín (tomo de Norma Editorial del que puedes leer aquí su crítica). Hablamos con ellos de esta historia, su forma de trabajo y sus elecciones artísticas.

Debido a su extensión esta entrevista se ha divido en dos partes. Esta es la primera.

El mito de Rasputín a través del arte de Manolo Carot y Hernán Migoya

¿Qué os lleva a adentraros en la figura de Rasputín?

Carot: Es un personaje que siempre me ha fascinado. Para mí es uno de los grandes iconos místicos de la historia de la humanidad y, como no podía ser de otra manera, su esencia se veía reforzada por una imagen icónica que hace las delicias de cualquier dibujante.

El único problema es que no me veía capacitado como guionista para llevar a cabo una historia en torno a un personaje de este calibre, así que se lo propuse a Hernán. Para mí Hernán es de los mejores escritores de este país, y cuando vi las primeras páginas que preparó me di cuenta inmediatamente que no me había equivocado pidiéndole ayuda.

Viñetas de Una revolución llamada Rasputín. Créditos: Norma Editorial
Viñetas de Una revolución llamada Rasputín. Créditos: Norma Editorial

¿Cómo surge el enfrentarle con Ayn Rand?

Migoya: Eso fue cosa mía. Siempre me ha atraído mucho la figura de Ayn Rand, porque es una autora impensable en España. Va en contra de lo que todo el catolicismo arraigado en la izquierda y la derecha españolas nos permite aceptar. Todo el mundo la odia en nuestro país y sin embargo a mí me parece una señora fascinante. Buscaba en realidad algo en Rasputín y su época a lo que me pudiera aferrar emocionalmente, que me motivara desde lo visceral, porque a mí lo de la lucha de clases y el cliché rasputiniano de gurú sexual eran dos asuntos que no me atraían mucho como guionista.

Pero cuando caí en que Rand debía de tener 11 años en 1916, el último año de vida de Rasputín, y averigüé que de adolescente era ya una decidida antizarista que apoyaba el ala moderada de la Revolución, me pareció apasionante poder oponerla como contrapartida del Monje Loco: una niña contra un crápula, una falsa inocente frente a un aparente depravado, una lectora voraz y atea racionalista a ultranza frente a un místico analfabeto. Ese contraste ya me daba mucha lana que cortar. Y por ahí comienza nuestra historia…

¿Y hacer una novela gráfica sobre ella ya de adulta?

Carot: A mí es un personaje que me ha cautivado. Antes de trabajar en el guion de Hernán, Rand era alguien bastante desconocido para mí. Había oído algunas de sus entrevistas, pero no las ubicaba en un personaje concreto. Ahora mismo, si tuviera que hacer un biopic, la elegiría sin dudarlo.

Migoya: A mí eso personalmente ya no me interesa tanto, aunque si Manolo, con ese talentazo que tiene, me llama para hacerlo, no me lo pienso dos veces, porque por Manolo y su arte lo dejo todo. Me interesaría más adaptar alguna de las novelas de Rand. El manantial sería un cómic fantástico, por todo lo que implica la necesidad de recrear visualmente el mundo arquitectónico en que se desarrolla la trama y por la relación casi sadomaso de la pareja protagonista.

Sin embargo, probablemente sería imposible realizar una adaptación con libertad, debido a todo el control que hay del material de Rand por parte de la secta de randianos. No creo que nos dejaran plasmar los elementos porno.

Fin de la primera parte de la entrevista sobre Rasputín con Hernán Migoya y Manolo Carot.

Síguenos en Google News o súmate a nuestro canal de WhatsApp (totalmente anónimo, nadie verá tu nombre o tu número) y no te pierdas ningún contenido. ¡Disfruta de la Cultura Pop!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *