Es cierto que 2021 no fue un buen año, la pandemia nos siguió golpeando a todos muy fuerte y eso es algo que tardaremos en olvidar (más cuando seguimos en ella). Pero 2021 también supuso el retorno de D’Artacán y lo hice en la gran pantalla, algo que hay que agradecer a Apolo Films y a todo su equipo, y por supuesto a Toni García, director del filme y production director de la productora audiovisual.
¿Cuándo y cómo surge la productora?
Apolo Films realiza un primer largometraje de ficción La larga noche de los bastones blancos dirigido por Javier Elorrieta y protagonizado con el actor Quique San Francisco, en 1977, y posee los derechos de grandes marcas de la animación mundial creadas en España como D’Artacán y los tres Mosqueperros, La Vuelta al Mundo de Willy Fog, David el Gnomo o Super Bernard, entre otras.
¿Qué formas de financiación tenéis para cada proyecto?
Con coproductores que aportan financiación a cambio de derechos, ayudas oficiales, por ejemplo en D’Artacán y los tres Mosqueperros contamos con un préstamo de SODENA (Sociedad de desarrollo de Navarra), preventas y préstamos bancarios.
¿Y qué hay del tema del merchandising? ¿Es una posible fuente de financiación?
Desde luego. Hay producciones de animación que llegan a cubrir un tercio del presupuesto con licencias. En D’Artacán y los tres Mosqueperros se han hecho figuras, peluches, tattoos, frisbees, camisetas, sellos, productos de botiquín…
¿Contempláis el product placement en vuestras películas?
En D’Artacán y los tres Mosqueperros no ha habido, por razones sobre todo históricas, claro.
¿Qué facturación anual tenéis?
En años recientes han sido todo gastos con la producción del primer largometraje de animación, D’Artacán y los tres Mosqueperros. Este año es año ya de plena explotación.
Las taquillas de todo el mundo se han desplomado por el COVID, pero D’Artacán y los tres Mosqueperros ha sido la octava película más vista del cine español con una recaudación cercana a 1.200.000 euros. Sigue su ruta de explotación en salas de todo el mundo y se inicia la ruta en plataformas como Netflix y televisiones en abierto como TVE.
¿Puede el cine de animación español competir a nivel internacional?
Por supuesto. De hecho, en las grandes producciones internacionales siempre hay artistas españoles. En nuestro país hay mucho talento y lo exportamos. Somos un país, sin embargo, con una industria con poco apoyo y posibilidades, en comparación a otras grandes potencias de la animación internacional.
Debemos seguir luchando para posicionarnos en el mercado internacional, en la medida que sería justa para nuestro gran potencial creativo y artístico. La animación española, tiene un gran futuro, pues somos un país de talento y los continuos avances tecnológicos en el campo de la animación nos permiten seguir investigando, creciendo y expandiendo posibilidades de nuevos desarrollos.
En películas de otros países siempre hay figuras, acuerdos con McDonald´s, camisetas… ¿por qué es diferente en España?
Sobre todo porque McDonald ‘s llega a acuerdos a nivel global y luego los explota territorio a territorio, reutilizando el mismo material. Esperemos que poco a poco, las productoras españolas, que cada vez somos más gracias a los buenos niveles de formación que se están alcanzando en nuestro país, podamos revertir esta situación.
¿Qué planes de futuro tenéis a nivel nacional e internacional?
En Apolo Films estamos ya con la siguiente producción, Super Bernard, para su estreno a nivel mundial. Es una marca con más de 1.300.000.000 de visitas en YouTube.
Gracias por tu tiempo, Toni. Con ganas esperamos esta nueva película.
