Snoopy.

O Rabanitos.

Los cebollitas.

Carlitos.

Frost y yo en versión Peanuts, por Entiman
Frost y yo en versión Peanuts, por Entiman

Peanuts, sencillamente.

Hay muchos nombres para referirnos a estas geniales viñetas pero lo que importa es el contenido, el genio que hay en la misma y esa visión dulce pero sin duda satírica del mundo.

Me encanta Charlie Brown y sus desgracias, digno retrato del hombre y su día a día. Linus siempre me conquistó y en ocasiones espero en la noche a ver si llega la Gran Calabaza. Otras me siento un poco Snoopy junto a su máquina de escribir intentando que salga algo bueno y no lograrlo, pero siempre volviendo a ello una y otra vez.

¿Mi primer recuerdo de ellos? No sabría decirlo. Supongo que al igual que mucha gente los he tenido de fondo durante toda mi vida, aunque sí tengo claro en la memoria un muñeco que me regalaron de un Snoopy aviador, con sus gafas, un largo bigote y las muchas veces que jugué con él. Desgraciadamente al ser niño se perdió pero todavía espero que algún día aparezca tras un armario en casa de mi madre, ojalá.

Mi Snoopy a lo Sherlock Holmes
Mi Snoopy a lo Sherlock Holmes

Aviador. Ese era solo uno de los muchos oficios que podías encontrarte en una figura, también estaba de futbolista, esgrimista o emulando a Sherlock Holmes (que me compré de forma reciente), pero no hay límite para la imaginación y Peanuts es una clara muestra de ello.

Durante varios días, hasta el 25 que se estrena en cines su muy esperada película, tendréis en este site un especial sobre estos maravillosos personajes de la mano de varios colaboradores que han querido aportar su granito de arena ya sea a modo de artículo o de ilustración, además de yo mismo que como buen amante de Peanuts no podía perderme esta cita.

Seguimos leyendo.

Ilustración de Borja Prieto
Ilustración de Carcayú

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *