Los míticos agentes 86 y 99. Creditos: Talent Associates
Si algo tiene éxito no pasará mucho tiempo hasta que aparezcan copias, en el mundo de la series serían producciones que intentarían seguir sus pasos o parodias que al referirse a un muy concreto hecho suelen envejecer muy mal. Pero esto no pasó con Get Smart, Superagente 86 en nuestro idioma, y es que si bien era una versión cómica de los tan de moda agentes secretos no lo era de uno en concreto, lo era del concepto en sí mismo y logró desarrollar su propia personalidad alejada de los otros como James Bond o John Drake; Maxwell Smart es un profesional aunque a veces las cosas se le compliquen un poco.
De profesión espía
Maxwell Smart no era un inepto, la serie no intentó hacer que sus aventuras fueran para ridiculizarle o que él fuera el elemento cómico de la misma. Se intentó crear un estilo propio, una línea de historias en las que él fuera el centro del universo; sí que se apostaba por la comedia pero en la que realmente se vivían aventuras de agente secreto. El agente 86, y su compañera/novia/esposa, se enfrentarán a villanos, sociedades que quieren controlar el mundo y contarán para ello con los mejores aparatos tecnológicos.
Dos nombres. Ese fue el motivo del éxito. Por una lado el del genio creador que fue Mel Brooks, incansable director y productor que ha trabajado incesantemente en la comedia aunque también en otros géneros, a él le debemos La loca historia de las galaxias y otras grandes comedias como Los productores (director y guionista de la primera versión) con una gran capacidad de reírse de todo pero no humillando a nada. El otro hombre al que hay que nombrar es a Don Adams, que falleció en el 2005, que logró dotar al personaje de una seriedad y paciencia que contrastaba totalmente con el toque cómico del que estaba impregnado y aunque este personaje le marcó para siempre no dejó de tener su carrera alejado del mismo e incluso fue la voz del Inspector Gadget.
La serie comenzó su emisión en 1965 en la NBC y estuvo en el aire hasta 1969 habiendo pasado entremedias a la CBS para su última temporada, aunque se han hecho muchas reposiciones de la misma ya que el público nunca se cansa de ella. En estos años además de a 86 conoceremos a 99, a su jefe al que interpreta Edward Platt, la organización CONTROL y su rival KAOS (no son siglas de nada, que sepamos, pero siempre van en mayúsculas. Un elemento más de la parodia), además de varios miembros de cada equipo y la asombrosa tecnología que usan (¿el zapatófono de Mortadelo y Filemón? De aquí, viene de aquí).
Un cierre, que no una despedida
La serie se canceló en 1969 pero no así las aventuras de Maxwell Smart que siguieron a través de dos películas para las que hubo de pasar algo más de 10 años. Puede sorprender que en vista del éxito que el personaje tuvo no se hiciera antes, pero sí que se planteó un proyecto para esto mismo durante la década de los sesenta y aunque no llegó a llevarse a cabo se aprovechó la trama en la propia serie. En 1980 llegaría The Nude Bomb, El disparatado agente 86 según existe traducido, y en 1989 Get Smart, Again!, o Superagente 86 ataca de nuevo. En estas dos historias se recupera no solo a los actores, también a los personajes y todo el pasado que tienen detrás aunque siendo evidente el paso del tiempo que usan para reírse de ellos mismos.
En el año 1995 se intentará una resurrección de la serie, se volverá al sencillo título de Get Smart, en esta ocasión con 86 siendo el jefe de la agencia y presentando al hijo que ha tenido con 99, Zachary Smart o sencillamente Zach, que será igual de patoso que su padre y estará interpretado por Andy Dick. No tuvo muy buena aceptación, o más bien ninguna, y se canceló con solo siete episodios.
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Escritor y periodista de amplia trayectoria (AQUÍ, Cinemascomics, Infonegocios…), especializado en Cultura Pop aunque también ha escrito de temáticas muy distintas como política y el mundo de los negocios. Creador del personaje infantil Frost, perrito de aventuras descrito por RTVE como «Un nuevo héroe para los niños». ISNI 0000 0004 4335 5012
Recuerdo que la vi tanto en castellano como en latino y me sorprendió cuando le oí con la voz de Pedro Picapiedra jajajaja
Nunca me había dado cuenta, tienes toda la razón.