Si me seguís en redes, o en este site, ya sabréis que por mi cuenta y gloria me he embarcado en una gira auto financiada (¿y eso? Pues por esto). La primera parada era Barcelona, pero no solo con una presentación, más bien un fin de semana repletito para no dejarme un solo momento de descanso.
El viernes 13 (de marzo de 2015, por si estás leyendo esto desde el futuro) el gran Marcos Muñoz me presentaba en Gigamesh tras dar un servidor la bienvenida a todo el que quiso acercarse y recomendar que leyeran al tristemente fallecido Terry Pratchett (y darle una taza de TARDIS de regalo a él por el favor).
Lo primero fue que los asistentes cogiera un test con preguntas sobre la series, para así hacer un pequeño concurso. Más o menos estuvimos cosa de una hora charlando sobre Doctor Who, la serie, anécdotas y momento predilectos. Recordando también cosas de Los sesenta no pasan de moda (no olvidemos que esta es una gira de ambos libros) y comentando alguna cosa sobre futuros proyectos, de los que me temo tampoco pude adelantar mucho (todavía). Además de ver quién había sido el ganador del cuestionario.
Y después vino lo mejor, firmar la obra. Poder hablar con tus lectores, saber qué les ha gustado o qué esperan, que te cuenten sus ideas sobre esta u otras series, sobre qué autores les gustan, es algo increíble, no hay mejor forma de definirlo.
Además, que ir a Gigamesh siempre mola. No diréis que no.
El fin de semana toca estar en KBOOM!, evento principalmente centrado en cómic pero que siempre están dispuestos a dejar un huequito aunque te alejes un poco del tema. Allí he estado compartiendo stand con Guillermo Carandini, autor de El día de la victoria (y el primer inconsciente en ser entrevistado en A Puerta Abierta). Un mano a mano entre sus obra y mis materiales, todo salpicado de risas y charlas de esas de arreglar el mundo (y la industria del tebeo en España, total, puestos a imposibles pues…).
Este evento se ha realizado por tercera vez, de nuevo en el Espai Jove La Fontana, con la presencia de autores como Javi de Castro o el gran divulgador Antoni Guiral (al que inevitablemente todos los que hacemos comunicación de cómic admiramos). Además de otros menos conocidos, pero con ideas y propuestas igual de interesantes, repartidos entre la zona de fanzines y el pabellón de artistas. En nuestro caso estábamos en este último con los amigos de Ediciones Imagion a un lado y el caricaturista (mucho más, realmente) Jaume Cullell.
Además en esta ocasión tuve la suerte de poder realizar una de las actividades, en concreto una charla centrada precisamente en el tema de la divulgación del cómic. Lo cierto es que ser la primera ponencia, un domingo y a las once de la mañana tiene su punto de complicación. Así que no quedaba más remedio que hacer algo ligero y sin entrar en tecnicismos que a esas horas cuestan de digerir. Y seguir una frase que mi padre decía mucho cuando vivía, “la primera obligación de un conferenciante es no aburrir”. A partir de ese punto ya viene todo lo demás.
Todo terminaba ese mismo día poco después de las ocho de la tarde. Apretones de manos, abrazos, besos, promesas de seguir en contacto, ideas y proyectos. Lo normal (y lo mejor) en este tipo de eventos.
¿Y ahora? Preparar la maleta, que el siguiente destino es mi Valladolid natal.
