La entrevista es un arte, complejo que si se hace bien puede dar lugar a momentos inolvidables. Hay muchas formas de enfocarla y otros tantos consejos que dar, pero esto no va por ahí, más bien hoy es para los que están al otro lado, para los entrevistados.
Si te mueves en el sector de la cultura y el arte no será algo que te pille de nuevas y seguramente ya hayas tenido varias experiencias hablando de tu nuevo disco, tu último libro o la obra de teatro que en breve estrenarás; en otros campos es menos habitual pero eso no quiere decir que un día no te vayas a encontrar cara a cara con un micrófono y tengas que hacerlo bien, no te asustes que esto es muy sencillo.
1) Prepara la entrevista
Sabes que te entrevistan, perfecto, entonces es mejor que no vayas sin tener en cuenta qué te encontrarás. No puedes pedir al periodista que te mande antes las preguntas para prepararlas (y aunque lo hagas, él no debería hacértelas llegar) pero sí que te informen sobre qué irá y en qué pretenden centrarse.
Igualmente en tu mano está entrar en Internet para rastrear al reportero, artículos que haya publicado, materiales del medio en el que se publicarán… Todo estos sencillos puntos harán que además de ganar cierta confianza no vayas de vacío, es muy importante una preparación previa que ayudará a dar lo mejor de nosotros.
2) No es tu colega, es un periodista
Quizá en algunos casos sí sea tu colega el que te hace la entrevista, a mí me ha tocado hacerlo con amigos y otros conmigo, pero piensa que en todo momento desde que os sentáis a hacerlo tú pasas a ser el entrevistado y él el entrevistador. Es una relación profesional en toda regla y debes tratarla de esa forma.
Él no te conoce, quizá no entienda tus chiste o si lo que ha dicho es una broma, no te la juegues. Relájate e intenta sencillamente conversar y charlar, responder con amabilidad y explayarte lo que consideres.
3) Si no lo dices, no se graba
“Es que yo no dije eso”, una frase que uno puede escuchar muchas veces y que como periodista no tiene más que volver a su grabación para comprobar que sí se dijo.
Si una entrevista es en vivo lo habitual (y recomendable) es que se registre en una grabadora, cámara, teléfono… y quede constancia de todo. Desde el momento en que se da al Rec y hasta que se pulsa Stop lo que digas será parte de la entrevista, así que si no quieres decir algo o querías dar una idea distinta es mejor que desde un principio lo hagas.
Si no lo dices, no se graba. Más sentido tiene esto cuando estás en pleno directo en televisión o en radio, ya que una vez dicho además se ha emitido y ya viaja por las ondas. Pensar antes de responder es una gran forma de no meterla hasta el fondo.
Tres sencillos consejos que espero os resulten útiles. Ante todo en una entrevista lo que debes hacer es relajarte, disfrutarla y dejar que fluya la conversación que estás manteniendo con otra persona.
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