El orgulloso Conde Nefaria, enemigo de Los Vengadores (reseña de Marvel Legends)

Puede decirse que los tres grandes villanos de Los vengadores son Ultrón, Kang y el Conde Nefaria. Estos dos los son además desde sus primeros tiempos, Kang apareció en el número 8 y el Conde Nefaria en el 13 pero en el caso de este último no se puede entender al personaje según es hasta mucho tiempo después, hasta 1977

Fue en ese año en la mítica Trilogía Nefaria cuando el villano pasó a ser un supervillano. Obtuvo sus increíbles poderes y ese excéntrico vestuario que, a todas luces, no debería funcionar pero lo hace. Le confiere un atractivo elegante y mortal a la vez que deja claro lo poderoso que es, con unos poderes que le han permitido batirse contra Thor o controlar al Hombre Maravilla.

La figura en cuestión que tenemos entre manos es de las últimas olas de Marvel Legends dentro de su apartado vintage de Iron Man, en cuyos blisters se reproduce el arte que mostraban las figuras de Toy Biz lanzadas con motivo de la serie de animación de los años 90 (aunque en su momento el Conde Nefaria jamás formó parte de tal colección). Pero hasta ahí llega el hecho retro, algo ideado para atraer a los más nostálgicos, y es que el muñeco es totalmente actual en su acabado, detalles y articulaciones.

Los accesorios

Como accesorios trae dos juegos de manos, como suele ser habitual unas abiertas y otras en puño, además de la capa roja y amarilla que casi siempre luce en los cómics (no siempre, todos los personajes cambian el uniforme de cuando en cuando). Y es aquí donde está el pero de esta figura de Marvel Legends. Si en la reseñada hace poco de Magneto se alabó el trabajo en su capa aquí habrá menos elogios, aunque tampoco puede decirse que vaya a ser una crítica feroz dado que no es necesario. La capa se sujeta al muñeco a través de un único agujero en la espalda donde esta no termina de encajar del todo bien debido al plástico y forma de la misma.

Sí, se puede sostener pero debe irse con cuidado si uno no quiere que se caiga cada vez que se cambie de pose al personaje, o quitársela para colocarle en la pose preferida pero siempre teniendo en cuenta que quizás después haya que cambiarla debido a la diferencia de peso con y sin esta prenda. Esto habría sido algo fácil de evitar con añadir otro agujero y enganche, ya fuera en la espalda o en el hombro derecho. Un pequeño fallo, que no defecto, que hace que el conjunto no sea todo lo resultón que podría.

Bebiendo de George Pérez

Tenemos a un Conde Nefaria que luce realmente bien y parece sacado al milímetro de alguna viñeta de George Pérez, y más en concreto de la portada del número 34 de Los vengadores del año 2000. La influencia del gran trabajo del muy tristemente fallecido profesional (nos dejó en 2022) es notable y salta a la vista con solo dar un vistazo a ese rostro henchido de orgullo.

La expresión facial logra captar a la perfección el aire de prepotencia que este noble europeo tiene, esa idea de estar por encima del bien y del mal y de que todos le deben respeto (el motivo principal para muchos de sus planes). Así su sonrisa muestra suficiencia, sus ojos condescendencia y el conjunto de todo esto sumado a sus arrugas faciales dejan claro que no es un malvado al que tomarse a broma.

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