Los fans de Terminator empezamos a tener un deuda con Aleta Ediciones. Ahora un poco más gracias a la publicación de Robocop vs The Terminator, dos de las grandes franquicias de Dark Horse enfrentadas y todo gracias a una historia de Frank Miller con ilustraciones de Walter Simonson.
Lo tiene todo para que los lectores nos quedemos satisfechos.
Y lo logra, con creces.
Aunque lo cierto es que el título es engañoso. Ya que uno podría pensar que lo único que va a ver es una pelea entre el policía de Detroit y un T-800 enviado por Skynet, pero entonces solo sería un cómic más y pasaría completamente desapercibido. En su lugar el guionista apuesta por una historia en la que Alex Murphy debe enfrentarse más que nunca a su propia humanidad, que es lo que le mentiene cuerdo pero también lo que le recuerda qué el hombre que fue ha muerto.
Esta lucha puede tener consecuencias terribles, ya que sin él saberlo es la puerta que permitirá la llegada de Skynet, del Día del Juicio Final y del fin de toda la humanidad. Pero no es solo algo metafísica, ya que la batalla por su alma se librará tanto dentro de él, como en el presente y en el futuro.
Una historia que no solo se sirve de los tópicos conocidos de ambas películas, no olvidemos que se publicó en 1992, ya que no duda en combinarlos de forma muy sabia para hacer que todo tenga sentido y funcione de la manera adecuada. Aquí la mitología de ambas franquicias se une y da lugar a una nueva, a una que es una lástima que nunca vayamos a poder ver en el cine, en la que el pasado de los personajes se entrelaza de una forma sorprendente, que tendrá terribles repercusiones en el futuro.
Estamos ante un Frank Miller en la cima de sus capacidades, antes de dejarse ir por páginas negras y manchurrones blancos, que conoce realmente bien ambas sagas y que todavía iba a dar algunos de sus mejores momentos al mundo del cómic. Todo esto potenciado por Walter Simonson, autor que escribió y dibujó una de las etapas más conocidas de Thor, y que logra aquí fusionarse por completo con su guionista.
Un crossover imprescindible.
