Sobre lo magistral de una obra

De cuando en cuando hay obras que aparecen en el mundo del cómic que pasan a convertirse rápidamente en una lectura obligada. En común suelen tener pocas cosas a excepción del buen hacer de las mismas, la necesidad de una reflexión tras su lectura y el tener un cierto conocimiento del mundo en el que nos estamos moviendo; no están al alcance de todo el mundo, exigen al lector que ponga mucho de su parte y seguramente eso es lo que las haga tan valiosas.

Títulos como La liga de los caballeros extraordinarios, Marvels, Batman: Amor Loco, La última cacería de Kraven, Astrocity… Todos con intenciones muy distintas, historias que lo son todavía más, autores que beben de fuentes dispares y finalmente todos ellos creadores de algo magistral. Ese es el punto clave.

A esta lista, mucho más extensa de lo que mis pocas letras os han mostrado, habría que sumar Planetary. Una lectura totalmente imprescindible que ha publicado ECC Ediciones en cinco volúmenes en los que además de la historia general incluye también los cruces con Batman o la JLA (o una versión de esta, al menos), lo que hace la experiencia mucho más completa.

¿Pero qué es Planetary?

Un maravilloso recorrido por la cultura popular (pulp y pop) del pasado siglo XX, todo camuflado como una historia que podría encajar dentro del género de los superhéroes pero que en realidad no lo es, solamente lo parece.

En cambio sí es una carta de amor a la literatura, a la fantasía y al cine de serie B, a los primeros cómics de Marvel y al trabajo de sus legendarios creadores… Es todo eso y más. Una lectura realmente imprescindible que nadie debería perderse.

Sus autores han logrado hacer una auténtica labor de arqueología recogiendo a los grandes nombres que conformaron el siglo pasado, al menos en forma ficcional, para traerlos de vuelta a la mente de todos los que seguimos sus aventuras. No será directo, no veremos esos nombres según los recordamos, pero están ahí, son una parte sustancial de toda la obra y la que hará que la misma nos enganche desde un primer momento.

En conclusión

Planetary fue una sorpresa. Apareció pero nadie sabía qué se iba a encontrar, logrando que todo el mundo se maravillara ante lo que tenía delante. La recopilación de hechos y datos que logran sus autores es ya de por sí impresionante, pero el traspaso de fantasía que llevan a cabo es todavía más digno de elogio; como suele decirse (y en este caso es totalmente cierto) logran que algo viejo y conocido luzca totalmente renovado.

Una obra entretenida y compleja a la par que brillante y nostálgica que solo es apta para los amantes del buen cómic.

“There are mad and beautiful things beneath the skin of the world we know, that you only see when you look at things on a planetary scale…”  – Warren Ellis.

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